viernes, 9 de julio de 2010

Esos ancianos que valen oro

El día de hoy tras leer una nota ‘conmovedora’ con video incluido de ‘El Comercio’, que era sobre ancianos ‘olvidados’ en asilos, vi una triste realidad en la que estamos todos los que podemos leer : inmersos en la degradación de la persona-humana- como ser que quiere y puede llegar a amar. ¿Cómo es posible el dejar abandonado a esa persona que te ha dado la vida? Sí es cierto, los padres no son perfectos, pero tampoco lo somos los hijos (por ahora no tengo esa gracia de ser padre, aunque quiero a una cachorrita como si lo fuera) y creo yo que nuestra misión es notar todas las virtudes con la que cuentan ellos y ser mejores, en mi caso tengo la valla muy alta, me gustan los retos, no importa.

Es conmovedor ver a esos ancianos pidiendo una visita de sus hijos, están totalmente solos en otro grupo de solitarios jóvenes de la tercera edad que esperan una visita de sus hijos y lo triste es que a veces la espera se les hace eterna. Por más que suene fuerte, me parecen esas personas que abandonan a sus padres un ‘gran desperdicio de esperma’, es por eso que vivimos en una sociedad triste y retrógrada que no puede avanzar…si es que no hay unión entre el clan familiar ¿cómo podrá haber unión de una comunidad o de un país?, bueno ese es otro tema.

Los ancianos son sabios, hay que recordarlo, sí empiezan a contarte la misma historia tres veces, cuatro, cinco veces o quizás cada vez que hablas con ellos; escúchalos, no hay por qué decir: ‘oh sí ya me dijiste eso’ o en caso si es que no quieres ‘perder’ esos minutos valiosos pues simplemente dilo, pero con cariño.

A mi parecer los niños y ancianos no deberían sufrir, los jóvenes y adultos podemos soportarlo, pero ellos no, aunque no se crea son los seres más inocentes que hay y a los que se tiene menos valor en muchos países, claro está, hay sus excepciones, que son contadas.

Lo que sería un mundo de familias unidas y países sin fronteras(otro tema), seria genial.

2 comentarios:

Claudia Prentice dijo...

Hola Carlo, me gustó tu post. Yo tengo un tío que tiene 83 años y siempre me quiere contar lo mismo, yo lo dejo porque se que luego lo extrañaré un montón (: ojalá todos convercen con sus abuelitos si es que los tienen aún con vida, esa oportunidad no la volverán a tener y no todos son los privilegiados.

Carlo dijo...

Hola Claudia,gracias por leerme,eres una de las pocas,con los dedos de una mano creo jaja. Claro, mi abuelita, con la que tengo una relación más cercana varias veces me cuenta lo mismo y pues dejo que lo haga,para ella es como la primera vez y se emociona mucho al hacerlo;además tiene la ventaja de que cada vez que ve una novela nuevamente,es como la primera vez para ella jaja. Y sí,muchos a veces no valoramos y no nos damos cuenta del privilegio con el que contamos.